domingo, 6 de agosto de 2017

Pensamiento sin título

“Para qué lo vamos a hacer si en algún momento nos vamos a ir…?”
Puedo asegurar que me cansé de escuchar esa pregunta/respuesta por parte de quien era mi marido durante unos cuantos largos años. Y de la mano de esa misma frase postergamos un montón de mejoras en nuestra pequeña y modesta casa, modesta pero en definitiva nuestro hogar.

Tantas veces dejé de lado el darme un simple gusto sin grandes pretensiones por considerar que no era el momento adecuado, o porque decidí (o decidieron por mí) destinar el esfuerzo a algo urgente o más importante, al menos eso pensé creer.

Como cuando uno tiene una botella de buen vino y no lo abre en espera de la ocasión perfecta y esta nunca llega. O como si quien está con vos reserva esa botella preciada para compartirla con un ser especial pero jamás la abre, es porque ese alguien especial claramente no sos vos.
Yo nunca, jamás entendí la pregunta/respuesta de mi ex marido:
“Para qué lo vamos a hacer si en algún momento nos vamos a ir…?”
Hasta que un día llegó ese momento de irse y se fue. Claro, se fue sin mi. Y sin hacer lo que había que hacer conmigo a hacerlo (o a postergarlo) con alguien más.
Y yo que aquí quedé, entre agujeros y telarañas me dí cuenta de que mi momento personal de hacer, y de beber ese exquisito vino, había llegado.

Comparto, con mis nenes hoy, no el vino, pero el fruto de mi esfuerzo para que ellos vivan modestamente mejor.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Carlota, Plastilina y otras cosas más

  Hola a todos!. Hace mil que no muevo esta página y no por que no haya hecho nada durante todo este tiempo. Hoy les quiero contar que en mi...